RESUMEN DE METADATOS
¿Qué hacés vos que yo no haga? Pistas sobre la identidad del Educador Social
Version
publishedFecha
2012Autor
Morales Pignatta, Marcelo
CFE
Editorial
Associação Brasileira de Educadores SociaisMetadatos
Mostrar el registro completo del ítemResumen
Desde hace 20 años ya, existe en Uruguay una carrera para formar profesionales
de la educación para desempeñarse en un campo en fuerte crecimiento y
diversificación, que otorga el título de Educador/a Social. Cómo definir su
especificidad y su campo de actuación es un desafío que no puede resolverse
únicamente desde una reflexión académica, desconociendo su viso político y su
dimensión práctica. En este sentido, la definición que se asuma de la educación
social, influirá en las decisiones sobre la formación de los educadores sociales, y
además, estos profesionales son un actor privilegiado a la hora de contribuir a la
conceptualización y delimitación del campo. Resulta imprescindible entonces
seguir pensando en esta relación entre un profesional y el campo que demanda y
da sentido a su función. ¿Cuál es la necesidad social a la que da respuesta este
profesional? Desde algunas marcas identitarias, que en nuestro país influyen en el
surgimiento y el desarrollo de la formación de los educadores sociales (y por tanto
en la construcción del campo de la educación social), intentaremos ir
desentrañando la relación entre el campo de las prácticas educativo sociales y la
especificidad de un profesional que por definición debe encargarse de esas
prácticas. Las demandas hacia los educadores sociales son de variada índole y
exigen respuestas complejas. Muchas de ellas toman al Educador Social como
alguien capaz de solucionar algo que no funciona o que no se ha podido resolver
adecuadamente hasta ahora: ¿hay jóvenes en una plaza y preocupan a los
vecinos? Un Educador Social. ¿No quieren volver al sistema educativo formal y
nada los motiva? Un Educador Social. ¿En la escuela los recreos son
descontrolados? Un educador Social. Y así podríamos ir tomando muchos más
ejemplos, hay diversas expectativas de lo que esta nueva figura hace o debería
hacer. Entrar en diálogo con estas demandas desde la formación, implica primero
que nada reconocer que el Educador Social no puede todo! intentaremos ver qué
cosas si puede