¿Cómo aprenden a evaluar los profesores?

Abstract

La formación en evaluación como problema La percepción de la evaluación en la enseñanza como problema constituye casi un lugar común desde la mirada de los distintos actores y en los distintos escenarios educativos. Abundan los diagnósticos y los intentos de ensayar caminos alternativos. Pero la sensación de encontrarnos frente a problemas que nos enfrentan a los límites mismos de nuestras pretensiones educativas institucionalizadas contribuye al malestar así como a reducirlos a sus dimensiones más operativas. Con el propósito de abordarlos críticamente y de superar el enfoque tecnicista de la agenda clásica de la didáctica (Litwin, 1998) nos propusimos indagar en la formación de los profesores desde el supuesto inicial de que allí pueden encontrarse claves valiosas tanto para la comprensión de las prácticas de evaluación en la enseñanza como caminos para re-pensarlas y re-crearlas. Desde el interés de situarnos en el ámbito de la Didáctica, y en vistas a aportar a la reflexión y posibilidades de mejora de la formación docente, nos propusimos investigar cómo se aprende a evaluar en el proceso de la formación de grado y cómo impacta esa formación en las prácticas de evaluación que se desarrollan luego en el ámbito profesional. A través de los relatos de experiencia y de las prácticas concretas de un grupo de estudiantes exploramos el sentido que tiene para sus protagonistas la formación docente en el campo de la evaluación, y el enfoque teórico y práctico en el que se sustenta. La investigación se realizó en el marco del Concurso organizado por la Dirección de Formación y Perfeccionamiento Docente para el Proyecto Educativo 610 “Fondos Concursables de Investigación Educativa”, en el período comprendido entre julio y noviembre del año 2009. Partimos de algunas preguntas que orientaron la investigación: ¿cómo aprenden a evaluar los estudiantes de profesorado?; ¿cómo se aborda la enseñanza de la evaluación en la formación docente?; ¿qué impacto tiene este aprendizaje en la “práctica docente” en el período de formación?; ¿qué supuestos teóricos (explícitos o implícitos en las prácticas) guían las prácticas de evaluación educativa? En la delimitación del campo problemático, ciertas ideas -fruto de la experiencia profesional y de la búsqueda teórica- funcionaron como supuestos: la evaluación no suele pensarse como problema de enseñanza, lo que oculta su efecto en la configuración de las relaciones de enseñanza y aprendizaje, y debilita su abordaje didáctico y, el modo en que se aprende a evaluar es decisivo en la configuración de las prácticas profesionales de los docentes. La naturaleza de lo investigado hizo que se optara por una metodología de carácter cualitativo desde una concepción interpretativa, en la que investigar es comprender la conducta humana desde los significados e intenciones de los sujetos que intervienen en el escenario educativo. Desde esta perspectiva el propósito de la investigación educativa es interpretar y comprender los fenómenos educativos más que aportar explicaciones de tipo causal.